Ningún plan de mercadeo para 2020 se hizo pensando en una pandemia

Nadie imaginó que 2020 presentaría un obstáculo tan arrasador para cualquier plan de marketing como esta pandemia que estamos viviendo, ni que el reto más grande sería obligarnos a cambiar su esencia comercial, para priorizar la responsabilidad social empresarial por encima de todo. Por esta razón es normal que usted ni su equipo tengan todas las respuestas, ni la fórmula exacta para enfrentar esta crisis a nivel mundial, por eso consideramos de valor compartir algunas recomendaciones que podrían ayudarlo para enfrentar una adaptación inminente del plan de marketing de contenidos, teniendo en cuenta que todo parte de su nivel de resiliencia y su estructura mental:

INTELIGENCIA EMOCIONAL

El pánico empresarial también existe, por eso es indispensable que piense cuál es el storytelling que se le está transmitiendo a sus colaboradores, no transmita a su equipo la incertidumbre y las presiones del momento, porque eso genera un ambiente destructivo e infunde miedo, y si desde la cabeza de una organización no se apela a la inteligencia emocional, es posible que esto termine por afectar la dinámica y la interacción de sus integrantes, por eso es esencial que se lidere un ambiente sano de trabajo o teletrabajo, libre de pensamientos tóxicos, porque es la única manera de sembrar un terreno constructivo donde pueda florecer la unión y el trabajo cooperativo para reinventar una empresa.

INTELIGENCIA COMERCIAL

Es ahora cuando se hace indispensable flexibilizar la mente, con respecto a las dinámicas de trabajo, a las ideas y evitar la rigidez que le impide a una compañía romper sus propios paradigmas. El poder de adaptación hoy es clave, así como lo fue para Darwin en su época, siendo la raíz de su teoría de selección natural, y es un buen medidor para predecir qué compañías lograrán evolucionar y llegar al otro lado de la orilla cuando esta prueba termine, teniendo en cuenta que hablamos de 

un reto que involucra cambios a corto, mediano y largo plazo, y que nada puede darse por sentado nada, ya que estamos avanzando y cambiando rápidamente 

según el comportamiento del entorno, de las leyes gubernamentales y su afectación directa sobre los mercados, porque querámoslo o no, nadie se libra de la desestabilización que trae consigo esta pandemia. 

Esto es mundial, por eso hay que observar con detenimiento y realizar un seguimiento a los movimientos de las leyes, los gremios, los patrones de consumo personal y corporativo, los nichos de mercado a los que se le debe apostar y a los que no, abriéndose a la posibilidad de que deba enfocarse en nichos que nunca antes había tenido en cuenta y más aún, que hasta depronto tenga que reinventar lo que es un plan de marketing, no sólo porque la responsabilidad social empresarial, por ejemplo, lo motive a ayudar a fabricar tapabocas, gel antibacterial o insumos médicos, como está sucediendo con muchas compañías, sino porque las oportunidades de mercado actuales son extremadamente limitadas, por eso hoy más que nunca debe haber tiempo para pensar, reaprender, reinventarse y estar dispuesto a perseguir ese pequeño haz de luz que podría divisar si se concentra y focaliza su atención en buscar soluciones y no más problemas. 

De igual manera, debe soltar su necesidad de controlar, porque en estos momentos casi nada está bajo control, y esto implica que tendrá que entender que todo está pasando a su tiempo, el del entorno, no solo el que usted quisiera, así que la paciencia será un componente imperativo en la reconsideración de su plan de marketing como un plan de contingencia o incluso como un plan de guerra para batallar la crisis que estamos enfrentando todos.

Recuerde que si no hubo antes inteligencia emocional ni comercial en su compañía, en estos momentos de pandemia es natural que exploten las consecuencias y dependiendo de cómo se mire el momento, a lo mejor podrá cambiar para salvar su empresa no solo ahora, sino para construirle un futuro más sólido, convirtiéndose en una época que termine agradeciendo, todo está en la forma como reaccione ante las diferentes realidades del presente.